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Mostrando entradas de marzo, 2016

La Enfermedad del "Amor": Capítulo 7

Capítulo siete: El tiempo es relativo cuando no puedes moverte de un lugar. A pesar de que tengo las persianas abiertas, el portátil y una televisión los minutos no pasan igual. Siento el peso de las horas en mis articulaciones y el cansancio de las semanas acostada en aquella incómoda cama. No puedo moverme, no pudo salir y mucho menos puedo quejarme. Estoy encerrada sin que nadie me ofrezca un poco de luz. Es verdad, me muero, pero sigo viva y eso parece que la gente del otro lado de la habitación no entienden. Suspiro frustrada y observo la pesada máquina que está conectada a mi pecho. Abro la camisa hasta ver el borde del cable pegado justo por debajo de mi teta. Frunzo el ceño y pienso en quitármelo, pero si lo hago una alarma se activará y volveré a tener a enfermeras asustadas buscando la forma que la muerte no me lleve. Vuelvo a suspirar y cierro la camisa. Me acercó al borde de la cama y busco a ciegas las zapatillas. El suelo está frío pero me alegra saber que aún puedo ma

Perdón: Cuatro

Cuatro: El amor carece de lógica. Le habían dicho de pequeña, pero en su diminuto corazón no podía comprender con claridad el significado de esas palabras. Sabía que amar era una de las experiencias más codiciadas por el ser humano, incluso sus padres, quien se amaban con locura, a veces sentían lástima de los pobres que no les había tocado esa dicha. Y después de tanto años, al fin podía explicar aquello que sus progenitores no podían expresarles con palabras, porque después de todo, el amor es único para cada persona. Su amor era único, peligroso y pendía de un fino hilo que podría cortarse en cualquier momento, pero ahí estaba ella, cogida de la mano y siguiendo a ese apuesto ser. Un hombre que no sólo le prometía sexo apasionado, sino grandes dosis de felicidad. Una que con las muertes de sus padres había perdido por completo...

Perversión: Capítulo 7

Capítulo 7: Antes que la puerta tocara la pared los dos estaban a una distancia de seguridad. Él se había colocado el cuello de la camisa y abrochado los botones, mientras que ella se bajaba discretamente la falda y cruzaba apretaba los muslos para contener los picores que le inflamaban las paredes de la vagina. Cuando se sintió un poco más segura con su aspecto físico levantó la mirada para encarar al sujeto que les había interrumpido. Había pasado años desde que se sentía de aquella manera, una especie de culpabilidad con rabia. No sabía donde meterse, tampoco que decir y mucho menos quería dar explicaciones a gente que no se lo merecía. Y mucho menos a él, no después de que se hubiera ido, dejándola no sólo con el corazón roto si no con tantas deudas que tuvo que vender todas sus propiedades y terminó viviendo en ese minúsculo apartamento. Le gustaba, adoraba su nueva vida y todo gracias a John. Su ex novio y casi marido. Cruzo los brazos poco dispuesta a cooperar en esa c

Conociendo al demonio: Capítulo 2

2.El hombre perfecto No recuerdo como llegué a casa. Solo que Derek había sido lo último que había visto. La cabeza me martilleaba como si estuviesen haciendo obras en mi cerebro y un repentino olor a comida inundó mi nariz. ¿Quién diablos estaba en mi casa?

Perversión: Capítulo 6

Capítulo 6 Markus estaba ahí,delante de ella como un hombre perdido que no sabía donde meterse. Cuando Alex se acercó,pensaba que se la iba a comer el lobo feroz. No podía creerse que ese hombre estuviese ahí delante,mirándola de una forma completamente diferente a la que estaba acostumbrada. Y tampoco podía creer que su padre la hubiese mandado directamente con el hombre que la ataba,la torturaba de mil formas posibles en la cama. 

Príncesa: Capitulo 5 (Final)

Capítulo 5: Había paseado miles de veces por esa plaza, saludando a rostros conocidos y hablando con turistas pesados. Más de una vez se había detenido a beber un café en la cafetería de la esquina y cada día, solía pararse para escuchar la música en directo de los músicos al aire libre. Ese mismo recorrido, lo llevaba haciendo desde que tenía memoria, pero esa vez era tan diferente que le producía un cierto picor en los ojos y la querían hacer llorar. Se mordía el labio y controlaba la sensación de añoranza y en cierto modo la desazón. No era la primera vez que volvía a Venecia, y sabía que no sería la última pero ese día, aquello era tan diferente que parecía más una pesadilla que un sueño... La Basilica de San Marcos estaba decorada con grandes lazos color vino, un olor a rosas y una enorme alfombra roja que cubría el camino al altar. Las paredes y las lámparas estaban vestidos con horteras lazos y flores, dándole a la iglesia un color más festivo, aunque los invitados se mante

Perdón: Tres

Tres: La primera vez se suponía que debía ser algo especial. O eso había oído de algunas clientes adolescentes que solían contarle sus intimidades cuando estaban muy borrachas. La mayoría aceptaba el hecho de que su primera relación sexual fue un fracaso. Otras la recordaban como algo patético y muy pocas de ellas, como algo mágico y especial. Después de escuchar esos relatos, las hablantes exigían que ella contara su experiencia, obviamente creían que al tener esa edad y un físico atractivo seguramente habría tenido más relaciones sexuales exitosas que desastres, como ellas llamaban a la suyas. Antes del encuentro con Nicholas, solía cambiar de tema invitándoles a una copa, pero después no lograba encontrar ninguna palabra. No diría que fue mágico, pero tampoco algo agradable del todo. Más bien, no estaba segura de lo que había pasado. Sabía que ya no era virgen, esa misma noche sus bragas terminaron manchadas de un intenso rojo y al día siguiente, sentía un incómodo dolor en la i

Princesa: Capítulo 4

Capítulo 4: Nunca se había considerado una persona de relaciones largas. A decir verdad en el momento que veía que la otra persona quería más, solía salir corriendo. Literalmente. Se cambiaba de móvil y de casa. O al menos el tiempo suficiente para que el susodicho se diera por vencido y abandonara la isla. Que era lo que solía pasar. Nadie luchaba por ella, aunque tampoco es que lo quisiera. Se consideraba una persona libre, sin restricciones sociales y mucho menos quería estar encadenada con nadie, no cuando todavía tenía mucho que experimentar y sentir. Así que, cuando su príncipe le pidió una relación formal se lo pensó. Sabía lo que suponía aceptar estar con alguien de la realeza. Era historiadora y sabía que la familia real tenía libros de ochocientas páginas de protocolos y reglas, que honestamente no sabía si quería cumplir. Pero sentada delante de Cosimo, mientras le sujetaba la mano y le clavaba esa mirada oscura, no estaba segura si rechazarlo. Después de todo creía en l

La enfermedad del "Amor": Capítulo seis

Capítulo seis: Debo ser fuerte. O al menos eso me digo cuando camino por los pasillos del hospital. Aún siento la espalda helada, las nalgas me duelen y estoy plenamente convencida que el mono blanco está algo manchado. No dudo que las señoras de limpieza hagan bien su trabajo, pero estar tirada en el suelo más de veinte minutos sin moverse atrae más polvo que una fregona bien mojada. Quiero esconderme en los vestuarios hasta sentirme en mejor condiciones, pero una señora ha roto aguas, por lo que debo hacer mi trabajo. Después de todo esa mujer me ha pedido que le ayude con la laborar de traer al mundo a su hijo. ¿Cómo puedo negarme? Además, tampoco podría explicarle nada, porque después de todo no pasó nada. Esa media hora pasada tan sólo me demostró que un juramento si no está hecho de corazón no sirve para nada. La puerta del despacho de Sam está cerrada, con llave y no hay ningún cartel que ponga cuando volverá. Sé que debe hacerlo, después de todo su sala de espera est

Unión Blogger

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Y comienza la iniciativa ésta en cuestión. Bien, si mal no entendí hay que poner una entrada sobre los Blogs que te hayan gustado y hacer un poco de spam. Se supone que hay que hacer una entrada cada mes y comentar lo que he dicho antes, así que comenzaré. Para ser honesta he visto un par de blogs, pero tampoco me he bañado en leer cada uno de ellos, porque solo con una ojeada no se puede saber "¡Éste me gusta y éste no!" y poner uno por poner no me parece del todo correcto. He visto tres y me han gustado lo que he visto, pero por los momentos me iré a lo seguro, porque después de todo es uno de los blogs que más conozco y me gusta mucho su contenido y la forma de expresarse y en fin , todo lo demás y es... (sonido de redobles).

Perdón: Dos

Dos: Llevaba días paseando la tarjeta en el bolsillo. La había colocado ahí con la firme intención de entregárselo a su propietario, y así terminar la cadena de miradas incómodas, encuentros supuestamente “casuales” y sobre todo, aquel nudo constante que se le formaba cada vez que lo veía entrar al bar. Siempre vestía atractivo, con su traje azul marino, su corbata negra y su caballera discretamente desordenada. Sus labios finos se curvaban en una prepotente sonrisa cuando ella daba un pequeño salto y huía a la calidez de la barra. Sentía que ahí, el poder de su testosterona no podría alcanzarle. Pero era simplemente una mera excusa para alejarse de él y no entregarle la tarjeta. Esa misma escena se repetía día sí, día también. Excepto los lunes que el bar mantenía sus puertas cerradas, pero aún así, él con su gracia de adonis lograba encontrarla, en cualquier lugar que ella estuviera. Si no fuera porque sabía que sus tutores de alma habían prohibido a Nicholas acercársela, jura

Princesa: Capítulo 3

Capítulo 3: La ciudad descansaba sobre unas calles silenciosas, disfrutaban los ecos de un festejo pasado y gozaban en secreto de un futuro descanso. Los gremios se juntaban en la plaza de San Marcos para celebrar el cierre de temporada. Sacaban unas largas y amplias mesas llenas de manjares dignos de un rey, músicos del barrio se unían para entonar melodías jocosas y cantar canciones perversas. Las risas llenaban Venecia de alegría y cargaban una vez más las pilas para nuevas jornadas de trabajo. El verano había acabado, pronto llegaría el otoño y con ello, una nueva ola de turistas sedientos de historias. Los guías oían en silencio las nuevas anécdotas de los vendedores, las ancianas contaban nuevas leyendas y los niños pequeños se inventaban cuentos para el deleite de los adultos. Por un momento, los isleños disfrutaban de su Isla sólo para ellos y por ellos. Gianella contemplaba la fiesta desde una precavida distancia. Sentía que su cuerpo pedía descanso, pero la niña interior luc

Perversión: Capítulo 5

Capítulo 5: Al abrir los ojos no se creía lo que estaba viendo. Tardó unos minutos en recordar lo que había ocurrido la noche anterior, y otros tantos en confirmar que no estaba soñando todavía. Se incorporó en el colchón, cruzó los brazos sobre su pecho y contempló de forma clínica aquel ser perfecto que dormía tranquilamente a su lado. El cabello rizado oscuro le caía sobre los ojos, su labios carnosos curvados en una tranquila sonrisa y su pecho con bello subía y bajaba lentamente. Se frotó la cien intentando encontrarle alguna explicación para poder decírsela cuando se levantara iracundo. Había oído de su esposa que el susodicho tenía un mal despertar. Se mordió el labio y deslizó sobre las sábanas hasta huir al baño. Cerró la puerta con cuidado y entró en la ducha. Deseó que el sonido del agua no despertara a la bestia. Todavía tenía que taparse sus verguenzas, preparar café y pensar una buena excusa para informar al hombre.

Perversión: Capítulo 4

Original  En Proceso.  Si quieres ponerla en alguna página ¡Adelante! Pero por favor, da créditos. Éste será un proyecto conjunto entre Kath y yo, esperamos que lo disfrutéis tanto como nosotras al escribirlo.  AVISO: CONTIENE LENGUAJE SEXUAL EXPLÍCITO

Perdón: Uno

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Original En proceso Si quieres compartirlo, seré muy feliz. Acuérdate de dar créditos. Perdón Efímero: Nada dura eternamente, pequeña. Las palabras de su madre resonaban en su cabeza como un eco, haciéndole ser consciente de que no podía quedarse quieta, si realmente quería aquello debía ir y conseguirlo. Todo tiene un tiempo limite y la felicidad es una de ellas. Lo había sabido desde siempre, y delante de las tumbas de sus padres se prometió aprovechar el momento, disfrutar y coger todo lo que pudiera antes que se desvaneciera entre sus manos. Fue por eso que estiró sus brazos, abrió su corazón y le confió cada una de sus debilidades, aquel tipo de ojos claros y sonrisa traviesa. Al instante supo que estaba cometiendo un error, pero el tiempo para pedir perdón llegaría después, en ese momento tan sólo quería disfrutar y ser feliz.